miércoles, 3 de marzo de 2021

Disciplina, interdisciplina y transdisciplina (fragmento de artículo)

 

Salvador Mora Velázquez

El punto de partida que sugerimos debe aclarar tres referentes que se impli- can en la construcción del método, técnicas que orientan las investigaciones y resultados. Sin embargo, debemos considerar que el concepto de disciplina va más allá de una primera aproximación a una serie de conocimientos que determinan una rama particular de saber. Esta simple definición no es sufi- ciente en la medida en que adolece de una revisión del programa de inves- tigación al que se enlaza la existencia de un saber disciplinario, es así que el conocimiento disciplinar está determinado por una perspectiva unitaria (por el campo de estudio) que establece: 

[...] una secuencia de teorías científicas, con continuidad espacio-temporal que relaciona a sus miembros según un plan inicial común, éstos facilitan el abordaje teórico, la sistematización y socialización; estas cualidades conlle- van a plantear que la investigación se realice atendiendo al principio de redes de problemas o de comunidades científicas, bajo la concepción de Progra- mas de Investigación, lo que permitiría conferirle un carácter institucional a la acción investigativa, además de promover una acción interdependiente en la producción de conocimiento.

Si bien hacemos uso del programa de investigación, asumimos que una disciplina se configura en un proyecto institucional, a partir de la con- solidación de su objeto de estudio hasta lograr su autonomía y el estable- cimiento de sus teorías, métodos, técnicas y estrategias de investigación; así como la determinación de espacios donde se desarrolla el proceso de enseñanza, transmisión de conocimiento y la práctica profesional.Sin olvidar el aspecto de la construcción de una comunidad científica que a manera de redes académicas produce, intercambia y evalúa su objeto de estudio al interior de su campo disciplinar, la disciplina se descubre como un espacio con capacidad autológica para encontrar, al interior de la misma disciplina, los elementos y procesos explicativos que definen y evalúan su rama de saber. 

En virtud de lo anterior, impulsando en esta digresión, podemos consi- derar que un campo disciplinar determina a los individuos, miembros o no, a experimentar una serie de prácticas que definen los protocolos que determinan la actuación de esa comunidad académica.Así, una disciplina es un campo académico donde existen una pluralidad de actores definidos por relaciones objetivas, quienes desde la posición que ocupan en el campo participan de la distribución del poder o capital “cuya posición determina acceso a específi- cos beneficios inherentes a cada campo, así como una relación de acuerdo a otras posiciones”.Como hacemos notar, la pluralidad de actores y el lugar que ocupan en la estructura o campo establece una función, por lo que po- demos señalar que un campo académico es: 

[...] un espacio complejo compuesto por productores (investigadores y aca- démicos), distribuidores (profesores e instancias de difusión), consumidores (estudiantes, investigadores y estudiosos) e instancias legitimadoras y distribui- doras del bien (universidades e institutos de investigación). El capital eficiente es el cultural que puede ser adquirido por los estudiantes y legitimado a través de títulos y certificaciones. Asimismo, este capital cultural puede transformar- se en capital simbólico de reconocimiento cuando se acumula y los grupos en el poder lo reconocen; entonces los sujetos ascienden a una posición elevada, y adquieren el reconocimiento y la capacidad para definir lo que es legítimo y valioso en el círculo en el que se desenvuelven.

Desde esta perspectiva, la metáfora espacial de los campos, planteada por Pierre Bourdieu y que, de cierta manera, Berthelot retoma para descri- bir y definir el desarrollo de una disciplina, nos lleva a valorar la dimensión histórica e institucional de una disciplina para hablar del porqué y para qué hacemos investigación. 

Ahora bien, debemos dar cuenta de las contingencias del saber discipli- nar no sólo porque estamos frente a un sistema mundo que se vuelve com- plejo sino porque la aparición de la complejidad se da a partir de un sistema social que es incapaz de establecer vínculos de relación entre sistema/entorno (Luhmann). Es decir, la complejidad representa “la sobreabundancia de rela- ciones, de posibilidades, de conexiones”que impide, por ejemplo, que al in- terior del subsistema de la política haya la capacidad política y administrativa en las agencias de gobiernos, en los tomadores de decisiones, en los actores de la sociedad civil para encontrar soluciones. Esta contingencia se extiende a las disciplinas, pues del mismo modo el conocimiento enfrenta una falta de capacidad para sistematizar y ofrecer una interpretación de los procesos y re- laciones que determinan el mundo social. 

La incremental complejidad acarrea una creciente diferenciación funcio- nal hacia el interior de cada uno de los subsistemas que componen el sistema social.Esta reorganización funcional de la sociedad, bajo un modelo acéntri- co, constituye un momento evolutivo del sistema social, lo que permite con- solidar la existencia de subsistemas que se robustecen a partir del desarrollo de su autonomía y posibilidad autopoiética para producir los elementos que permitan su reproducción. De esta manera, podemos advertir que la existen- cia de sistemas complejos es uno de los momentos de la evolución del sistema social para el cual el conocimiento disciplinar no estuvo preparado. 

Es así que consideramos a la interdisciplina como una propuesta teórica que al interior de las comunidades académicas ofrece: 

[...] expandir la mirada de las dinámicas intransitivas que acuden al agotamiento de teorías y metodologías. En otros términos, la interdisciplinariedad bien eje- cutada, por grupos de científicos con marcos teóricos comunes, permite ren- dir cuenta de las articulaciones entre dominios disciplinarios quebrados por el aislamiento del conocimiento multidimensional a partir de una supuesta her- menéutica crítica.

Se debe evidenciar que el desarrollo de un saber interdisciplinario está expuesto a las resistencias que manifiestan disciplinas que abiertamente se opo- nen a reconocer la teoría de los sistemas complejos, una propuesta teórica que busca encontrar, con base en el trabajo colaborativo, avances importantes en las disciplinas de manera singular.Al mismo tiempo que ocurre lo anterior, hay otras ciencias que se abren a la teoría de los sistemas complejos, pero hay contingencias en su receptividad. Incluso, podríamos hablar de una disputa de paradigmas en el que está involucrada la teoría de los sistemas complejos. A saber, esta pugna aún no definida nos pone frente a múltiples teorías expli- cativas en las ciencias sociales. 

Sin omitir el cambio de paradigma que implica pensar desde la simpli- cidad a la complejidad, la interdisciplina está determinada por la existencia de lo complejo, que establece: 

[...] cuáles son las condiciones que debe reunir dicha metodología. En este contexto, metodología “adecuada” significa que debe servir como instrumento de análisis de los procesos que tienen lugar en un sistema complejo y que ex- plican su comportamiento y evolución como totalidad organizada.8

Es por eso que la interdisciplina no es la adición de saberes o disciplinas, o incluso de estudios parciales que atienden un fenómeno, sino que cuando nos hemos referido a la multiplicidad de interacciones asumimos que las co- rrespondencias en las relaciones definen el vínculo que ocurre entre el todo y las partes. Sin embargo, debemos reconocer que muchos de los trabajos interdisciplinarios o pluridisciplinarios cometen errores, pues sólo son ejerci- cios de investigación de convergencia disciplinar en el que se busca, desde su propia perspectiva (método, técnica, instrumento de validación), ofrecer una respuesta a un mismo objeto de estudio, sin exponerse a ser impugnados en su capacidad explicativa, tratando de salvaguardar su autonomía e indepen- dencia como disciplina. 

Nuestro reto es trascender estudios disciplinarios o incluso esas mira- das que adicionan saberes, suponiendo que realizan trabajos con carácter in- terdisciplinario. Orientar nuestro esfuerzo hacia la transdisciplina se debe a que el conocimiento se construye con base en una agenda de investigación abierta a la innovación y que, a su vez, busca explicaciones inclusivas a temas que demandan la atención de saberes que a fortiori se involucran en el trata- miento de asuntos urbanos, estudios regionales, temas sobre violencia, pro- blemas ambientales, entre otros. Estamos más próximos al planteamiento de Jean-Claude Passeron, quien consideraba que la convergencia de las ciencias sociales está determinada por factores geo-históricos, por lo que el contexto espacio-temporal de los fenómenos sociales condiciona a que haya múltiples posibilidades de estudio, ya sea métodos, programas de investigación, etcéte- ra, pues la realidad es inabarcable y es imposible que pueda contenerse en un marco de análisis único. 

Si hay un atributo o capacidad que debe desarrollar el estudioso o es- tudiante en las ciencias sociales es reconocer que: 

[...] el científico es un trabajador de la prueba, un trabajador de la explicación; en las ciencias sociales es también un trabajador del contexto, como dice Jean- Claude Passeron, porque no existe un hecho social que no implique una rela- ción con un determinado contexto de tiempo y de lugar. Es lo que el citado autor llama “propiedad deíctica” de los hechos sociales, es decir, los hechos so- ciales siempre implican una referencia implícita o explícita a actores sociales y a circunstancias de tiempo y de lugar.

De las ideas anteriores derivamos que la transdisciplina, más que la in- terdisciplina, alienta una discusión que garantiza el diálogo a partir de las re- laciones e interacciones al interior de las disciplinas sin estar acotado por las fronteras establecidas por los programas, métodos y técnicas de investigación. Es así que la transdisciplina es: 

[...] un proceso de construcción del conocimiento a través de constantes, nu- merosos y fecundos trabajos teórico-empíricos, abiertos a las tendencias hete- rogeneizantes consustanciales a toda realidad. La transdisciplina está relacionada con el cruce de fronteras disciplinares y de otro tipo de saberes en la construc- ción del conocimiento.10 

 

Bibliografía

1 A. Cova, A. Inciarte, M. Prieto, “Lakatos y los programas de investigación científica. Una opción para la organización investigativa nacional”, Omnia, vol. 11, núm. 3, Maracai- bo, Universidad del Zulia, 2005, pp. 83-108. Disponible en <https://www.redalyc.org/ pdf/737/73711304.pdf> (consulta: 16 de enero de 2020). 

2 Cfr. Jean-Michel Berthelot, La construcción de la sociología, Buenos Aires, Nueva Visión, 2003 

3 Aquiles Chihu,“La teoría de los campos en Pierre Bourdieu”, en Polis, núm. 98, México, uam-Iztapalapa, 1999, pp. 182-183. Disponible en <https://polismexico.izt.uam.mx/in- dex.php/rp/article/view/336/331> (consulta: 16 de enero de 2020).

4 Rosalba Angélica Sánchez Dromundo, “La teoría de los campos de Bourdieu como es- quema teórico de análisis del proceso de graduación en posgrado”, Revista Electrónica de Investigación Educativa, vol. 9, núm. 1, Instituto de Investigación y Desarrollo Educativo, 2007. Disponible en <https://redie.uabc.mx/redie/article/view/161/1032> (consulta: 16 de enero de 2020).

5 Ignacio Izuzquiza,“Introducción”, en Niklas Luhmann, Sociedad y sistema: la ambición de la teoría

 6 Cfr. Danilo Zolo, La democracia difícil, México,Alianza Editorial, 1994.

7 Ronald Rivera Alfaro, “La interdisciplinariedad en las ciencias sociales”, Reflexiones, vol. 94, núm. 1San José, Universidad de Costa Rica, 2015. Disponible en <https://www. redalyc.org/jatsRepo/729/72941346001/html/index.html> (consulta: 21 de enero de 2020). 

8 Rolando García, “Interdisciplinariedad y sistemas complejos”, Revista Latinoamericana de Metodología de las Ciencias Sociales, vol. 1, núm. 1, Buenos Aires, Universidad Nacional de La Plata, 2011, p. 67. Disponible en <https://www.google.com/url?sa=t&rct=j&q=&es rc=s&source=web&cd=1&ved=2ahUKEwjowLjJxZXnAhUI2qwKHQDDHQQFjAAegQI AhAB&url=https%3A%2F%2Fdialnet.unirioja.es%2Fdescarga%2Farticulo%2F3869767.pd f&usg=AOvVaw3qBUfsCLJPhjz_2T7tKUWm> (consulta: 21 de enero de 2020). 

9 Martha Rizo García y Tania Rodríguez Mora, “Epistemología y habitus académico en la enseñanza de la investigación. Entrevista a Gilberto Giménez Montiel”, Andamios. Re- vista de Investigación Social, vol. 13, núm. 31, mayo-agosto, México, Universidad Autóno- ma de la Ciudad de México, 2016. Disponible en <http://www.scielo.org.mx/scielo. php?script=sci_arttext&pid=S1870-00632016000200177> (consulta: 21 de enero de 2020)

10 Enrique Luengo González,“La transdisciplina y sus desafíos a la universidad”, en Enrique Luengo González (coord.), Interdisciplina y transdisciplina: aportes desde la investigación y la intervención social universitaria, Guadalajara, iteso, 2012, p. 11. 

 

 

 

 

 

3 comentarios:

  1. Es importante saber cómo se construye el conocimiento. Con estas líneas me queda claro las diferencias y características puntuales de cada concepto. A su vez, es vital donde se aplique y para qué uso de investigación.

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  2. El artículo que leí fue el de nuestro profesor, Salvador Mora Velázquez el cual habla sobre cómo es que estas subcategorías de una disciplina pueden influir en nuestra vida diaria y como es que una secuencia de un campo multidisciplinar que logra determinar a los individuos, incluso miembros y como es que experimentan diversas prácticas que los definen como protocolos que conllevan a una actuación, eso fue lo que más me llamo la atención y lo que más me marcó de dicho fragmento del artículo del profesor.

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  3. El texto me pareció interesante ya que, siendo científica social considero que si bien el "exceso" de relaciones que existe hoy en día puede dificultar el estudio de las disciplinas, también ayuda a que cada investigador aporte algo de su conocimiento empírico ya que, con ello, se cumpliría mejor el estudio de algún fenómeno y se cumpliría su objetivo de valorar la dimensión histórica e institucional de una disciplina para hablar del porqué y para qué hacemos investigación como lo planteó Berthelot. Lo anterior, con ayuda de la pluralidad entre los participantes ya que, al no concentrar el poder en una sola persona, cada uno de los individuos puede aportar algo nuevo a a disciplina.
    Como estudiante de Ciencias de la Comunicación, se me hizo muy interesante el término transdisciplina pues la comunicación, es una ciencia social que está en constante cambio por lo que no hay un marco de análisis único (justo como lo plantea Jean-Claude). Por lo anterior, es importante la construcción de conocimientos por medio de la realidad y con ello, la investigación de distintos fenómenos sociales desde distintas perspectivas.
    Rodríguez Sánchez.

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